Un añito que lleva esperando esta receta a ser publicada... y por fin ha llegado su día! Estas galletas las hice el año pasado en un ataque de última hora halloweenero, así que decidí no publicarlas y esperar a este año, para hacerlo con un poco más de tiempo.
Como siempre, casi me pilla el toro...jijiji!
Están más que vistas, pero la verdad es que me gustó tanto como quedaron que decidí compartirlas, siempre habrá alguien que no las conozca o se anime a hacerlas al ver lo sencillas que son.
La receta la misma que (casi) siempre utilizo para las galletas decoradas, es super fácil de hacer y queda genial. No se le puede pedir más.
Con una masa estupenda, unos minutos para decorar, unas almendras enteras y un poco de mermelada de fresa... obtendremos unos dedos de bruja verdaderamente grimosos.
Ingredientes:
Para la masa:
- 225 g de mantequilla
- 220 g de azúcar
- 1 huevo grande
- media cucharadita de sal
- 450 g de harina de repostería
- 225 g de mantequilla
- 220 g de azúcar
- 1 huevo grande
- media cucharadita de sal
- 450 g de harina de repostería
- cacao puro
- esencia al gusto (yo pasta de vainilla y lima)
- esencia al gusto (yo pasta de vainilla y lima)
- colorante verde (opcional)
Para decorar:
- almendras enteras
- mermelada de fresa
En un bol ponemos la mantequilla (pomada) y el azúcar y mezclamos hasta conseguir una textura esponjosa. Puede ser con un tenedor o unas varillas, como prefiramos.
Añadimos el huevo batido, y seguimos mezclando.
Agregamos la harina y la sal tamizadas, y seguimos mezclando hasta que todos los ingredientes estén perfectamente integrados y nuestra masa base esté lista.
Una vez tengamos la masa "base", la dividiremos en 3 partes iguales. Esto por supuesto es opcional, podemos hacer todos los dedos iguales, cada uno como más le guste.
En mi caso una parte la aromaticé con pasta de vainilla (los blancos), otra con aceite de lima (los dedos verdes) y la tercera parte con una cucharada de cacao puro.
Cuando añado cacao a las galletas suelo añadir también un poco de leche, nada, una cucharadita de postre, para compensar la textura y que quede similar a la masa original.
Los dedos verdes los teñí con colorante verde, no es un color muy apetecible pero es perfecto para esta ocasión.
Envolvemos cada masa en film y la guardamos en la nevera al menos una hora, para que sea fácil manejarla luego.
Dar forma a las galletas es muy sencillo: hacemos unos cilindros de masa, yo los hice algo más grandes que un dedo humano, pero cada uno como prefiera.
Ponemos nuestros dedos índice y corazón formando una V, y hacemos rodar cada cilindro presionando levemente para marcar las galletas. ¡Esto empieza a parecerse mucho a un dedo!
Con un palillo marcamos las arruguitas de los nudillos.
Por último, pegamos la almendra con mermelada de fresa (vale cualquier mermelada, mejor si es rosa, pero nadie puede asegurar que la sangre de las brujas sea rosa y no amarilla... ;-) y bañamos el otro extremo de la galleta también en mermelada, para simular la sangre del corte del dedo.
Metemos nuestros dedos otra hora en la nevera, para que luego mantengan bien la forma al hornearlas.
Precalentamos el horno a 180ºC, y horneamos sobre la bandeja de horno y papel sulfurizado hasta que estén listas. Suelen ser unos 12-14 minutos, pero como siempre depende del horno y del tamaño de las galletas. ¡Y de como os gusten, claro!
Las movemos con cuidado para que enfríen en una rejilla, para que queden perfectas de textura.
Dejamos enfriar... y tenemos nuestras galletas listas! Son bastante grimosas, cierto, pero están suuuuper buenas.
Mi sobrina fue capaz de comerse ni la parte del corte ni la de la uña, le daba tanta grima que sólo podía con la parte central de los dedos. jijiijjiji
Si tenéis unas bolsitas tan cucas como estas (muchas gracias como siempre, Patt) quedan perfectas para regalar.
Y si no, en unas transparentes muy bien también. O sin bolsa, ¡quedan bien sea como sea!
Y lo más importante, como siempre, están buenísimas. La parte de la uña es inmejorable... ¡aunque no lo parezca! jijijiji!