MAGDALENAS DE PLÁTANO CON CHOCOLATE

Hace unos días un amigo cocinillas me mandó por correo (si,si, aunque parezca cosa de locos) entre otras cosas 3 magdalenas de piña. Habíamos hablado de que esta receta del blog cocinando para lola tenía que estar impresionante, y él fue el primero que la experimentó. Nos encantó a los dos.

Entre sus ingredientes está un sobre de gelatina del sabor que prefiramos, en mi caso es de plátano, y se me ocurrió ponerle unas pepitas de chocolate... ¡Me encanta esa combinación de sabores!

En el mercado hay gelatina de un montón de sabores (té verde, kiwi, mango,...), así que se pueden personalizar al gusto.

Ingredientes:

- 4 huevos
- 250 gr. de mantequilla.

- 250 gr. de azúcar.

- 300 gr. de harina.

- 1 sobre de gelatina con sabor (en este caso de plátano)

- 1 sobre de levadura química (tipo Royal).

- pepitas de chocolate (opcional).

Empezamos derritiendo la margarina y mezclando bien con la gelatina. ¡Desde este momento la cocina huele genial!

Batimos bien los huevos con el azúcar, y mezclamos con la margarina y la gelatina.

Vamos tamizando sobre ésto la harina mezclada con la levadura, mezclándolo bien.

Cuando hayamos acabado con toda la harina y la mezcla esté bien homogénea, añadimos las pepitas de chocolate.

La masa está lista, así de fácil.

Rellenamos con cuidado los moldes hasta unos 3/4 del total, lo ideal es con una cuchara grande o con una manga pastelera sin boquilla, como prefiramos.

Metemos al horno precalentado a 180º, el tiempo dependerá del tamaño de las cápsulas, pero entre 10 y 20 minutos. Cuando pinchemos con un palillo y éste salga limpio, será que están hechas.

¡Mirad qué esponjosas por dentro!

Podemos tomarlas así tal cual (están buenísimas) o ponerles algún tipo de cobertura. Yo tenía ganas de ser mala, así que a experimentar!

Una vez que las magdalenas estaban bien frías, derretí al baño maría unas gominolas de plátano (de las de toda la vida, con forma de plátano y azúcar por fuera), y cuando enfriaron un poco, añadí azúcar glas y queso de untar, hasta que vi que tenía la consistencia adecuada.

La mezcla me encantó, incluso para rellenar una tarta. Podemos hacerla de cualquier sabor!

Fui poniendo la cobertura sobre cada magdalena, y luego "para rematar la faena" confeti, fideos, bolitas... estaba deseando estrenar mis últimas adquisiciones!

Espero que os gusten, esta es una receta para repetir y repetir! Muchas gracias a patt por compartirla.

ESPAGUETI NEGRO CON LANGOSTINOS

Hoy os traigo una receta muy sencilla pero muy rica y vistosa. Tiene como ingredientes principales dos de mis básicos preferidos: la pasta y el marisco, en este caso espagueti negro y langostinos.

Eso si, hay que tener en cuenta a la hora de hacerlo para otras personas la aversión que tiene alguna gente hacia la comida negra u oscura. A mi personalmente me encanta.

Ingredientes:

- Espagueti negro (unos 80-90 gr por persona).
- Langostinos (unos 8-10 por persona).

- Salsa de tomate casera.

- Nata (opcional).

- Ajo, orégano, albahaca fresca,...

- Aceite de oliva picante (opcional).

Siempre empiezo pelando los langostinos, y salándolos y adobando con sal, ajo y aceite de oliva, dejándolos un ratito para que maceren y cojan bien todo el sabor.

Ponemos a cocer la pasta en abundante agua hirviendo con sal, según las instrucciones del paquete.
El color negro intenso se consigue con tinta de sepia, y además tiene un pequeño porcentaje en su composición de pescado.

Mientras se cuece la pasta, ponemos a calentar una sartén con un poco del aceite de maceración de los langostinos.
Cuando está bien caliente, ponemos los langostinos, y doramos por ambas caras, pero sin pasarlos demasiado, luego con el tomate acaban de hacerse. Si no, quedarán demasiado duros.

Añadimos salsa de tomate casera ( en mi caso llevaba ajo, cebolla, sal, un pelín de azúcar y aceite de oliva), las hierbas que más nos gusten, y damos unas vueltas para que los sabores se mezclen bien.

Podemos dejarlo así tal cual o añadir un chorrito de nata, yo esta vez le puse porque tenía abierta, pero no es imprescindible.

Cuando esté la pasta la escurrimos, a mi me gusta volver a ponerla un poco en la olla (con el fuego apagado o muy bajo) para que se evapore bien el agua y quede sequita.

Emplatamos el espagueti, y ponemos la salsa y los langostinos por encima. Rociamos con un poco de aceite picante (yo tengo siempre una botellita con aceite de oliva y unas cayenas dentro)... y a disfrutar!

Como os había dicho, es un plato muy sencillo, pero muy rico. Y como siempre, os animo a probarlo!

TARTA DE FRESAS CON NATA

Hoy os traigo la receta de mi tarta favorita. La receta original es de Josefina González, y desde que la probé no la cambio por ninguna.

Parece un poco larga de hacer, pero qué va, es muy fácil... ¡Y realmente merece la pena!
Ya he hecho varias veces esta tarta, y suelo ir improvisando la forma de hacerla según las necesidades.

La primera vez que la hice fue para el cumpleaños de unos amigos, para más de 20 personas.
Nunca había hecho una tarta tan grande, por lo que no tenía un molde de tamaño suficiente (y sigo sin tenerlo, jeje). ¡Menuda odisea! Al final usamos (tuve la suerte de tener una "pinche") de molde una olla enorme, no os digo más.

Esta vez era para el cumpleaños de mi hermana, y tenía ganas de estrenar mi nuevo molde de corazón y probar la decoración con chocolate sobre papel de burbujas… ¡Creo que la combinación quedó bastante bien!

Ingredientes:
Para el bizcocho:
- 3 huevos.
-130 gr. de azúcar.
- 40 gr. de harina.
- 40 gr. de maizena.
- 40 gr. de almendra molida.
- 1 cucharadita de Royal.
- 3 cucharaditas de agua.
- ralladura de limón.

Para el relleno:
- 9 hojas de gelatina.
-400 gr. de nata líquida.
-100 gr. de azúcar.
-300 gr. de yogur (puede ser de lo que nos guste: natural, fresa, vainilla, plátano, limón, …).
-500 gr. de fresas.

Para la decoración:
Ingredientes al gusto.
Puede ser de nata con fresas y almendras, sólo nata, …

En este caso es con chocolate de postres nestlé y fresas.

Procedimiento:

Empezamos por el bizcocho.
Separamos las claras de las yemas.
Batimos muy bien las yemas con 3 cucharadas de agua, la mitad del azúcar y la ralladura de limón hasta que se monten.
Mezclamos los sólidos y vamos incorporando a la mezcla de las yemas.
Montamos las claras con los otros 65 gr. de azúcar, y vamos incorporando al resto de ingredientes aireando bien.
Vertemos en un molde desmoldable (si es necesario untamos con mantequilla y enharinamos) y cocemos en el horno precalentado unos 25 minutos a 180º, hasta que esté hecho.

Una vez que el bizcocho esté bien frío, seguimos con el relleno.

Ponemos a hidratar las hojas de gelatina en agua fría.
Mezclamos 100 gr. de nata con el azúcar y ponemos al fuego removiendo continuamente hasta que se deshaga bien el azúcar.
Después de unos 5 minutos de poner las hojas de gelatina en agua, las cogemos, escurrimos un poco para evitar el exceso de agua y las echamos en la mezcla de nata caliente, removiendo hasta que se disuelvan del todo.
Montamos el resto de la nata, y la mezclamos con el yogur.
Mezclamos esto con la mezcla de nata, azúcar y gelatina.

Ya sólo nos queda introducir las fresas, que puede ser de dos formas:
- en trocitos, cuando la mezcla anterior esté un poco espesa para que queden homogéneamente en el relleno (yo lo hice así).
- trituradas, en cuyo caso aconsejo poner un par de hojas más de gelatina, por si queda demasiado blando el relleno.

Lo que yo suelo hacer es picarlas en trocitos antes de empezar a hacer el bizcocho, y ponerlas a macerar con un poquito de azúcar y ron. Así, aprovecho el jugo que sueltan para calar el bizcocho.

Para montarla, partimos el bizcocho en dos. Ponemos una de las mitades dentro del molde, calamos si queremos que esté más jugosa, vertemos encima el relleno y ponemos la otra mitad del bizcocho (también podemos calarla antes de ponerla sobre el relleno).

Esperamos a que cuaje (a poder ser toda la noche, pero si no 4 o 5 horas mínimo) para desmoldar y adornarla. Podemos levantar un poco la mitad superior del bizcocho para ver si está bien cuajado el relleno, no vaya a ser que se nos “desparrame”.

Vamos con la decoración.
Puede adornarse con nata y fresas, chocolate, frutas variadas… en fin, como más nos guste.

En mi caso, como quería hacerle el borde de chocolate con efecto burbujas, lo que hice fue forrar el molde con papel de burbujas que tenía en casa. (pincha la foto para agrandar)

Derretí chocolate de postres al baño maría, añadiendo un pelín de nata y con cuidado de que no le entrase nada de agua.
Fui cubriendo todo el papel con chocolate ( mínimo 2 capas). Cuando vi que estaba bien seco (no tarda casi nada, sobre todo en invierno), di una tercera capa y seguí el procedimiento de montaje normal. Así, la tarta queda "pegada" al borde, y aunque se rompa al cortarlo no se suele despegar.


¡Hay que desmoldar con mucho cuidado! Primero saqué el molde de corazón y luego poco a poco el papel de burbujas.
Coloqué encima más fresas picaditas, ¡Y lista! No sé a vosotros qué pinta os tiene, a mi me encanta!
Como aún no había proyecto de blog, no me esmeré demasiado con las fotos, lo siento.
Tampoco tengo ninguna foto del corte decente, salieron todas quemadas por el flash. Pero aún así se intuye lo rica que está… ¿O no?

PREMIOS

Hoy he tenido una sorpresita. Rocío me envió todos estos premios! Como soy novata en todo esto, he tenido que preguntarle cual era el procedimiento a seguir, porque no tenía ni idea.

Despues de que me lo explicara, y de buscar alguna información más sobre cadenas de premios en blogs, he decidido (más que nada por falta de tiempo) no participar en premios ni memes.

Por supuesto, esta cadena voy a continuarla.

Agradezco muchísimo a Rocío que pensase en mi para esto, y ya que sé que no voy a recibir ni enviar más, quiero pasárselos a dos de mis blogs favoritos, están entre los que consulto a diario esperando las nuevas entradas. And the winners are...:

-Carmelilla Me encantan sus recetas y la forma tan sencilla de explicarlas. Y de esas pizzas que quitan el sentido ya ni hablemos!

- Alegna, para celebrar esos 2000000 de visitantes! Su blog es genial, os recomiendo daros una vueltecilla, es una artista!

Un saludo a las tres!

MINIMAGDALENAS DE FLANÍN

No sabría como describir estas magdalenas, creo que las fotos hablan por sí solas. Son súper ricas y esponjosas, y con un colorcillo...mmmm! ¡Impresionantes!

Las vi en el foro MR, y me quedé “prendá”.Al parecer es una receta que publicó Suila, pero yo las vi en un post de Paca (pinchando podeis consultar la receta original).

No la he seguido tal cual, cambié algunas cosas para aprovechar unos restos que tenía por casa y otras porque no las tenía en casa en este momento. O sea, ¡que me apañé con lo que tenía! jajaja!

Ingredientes:
-3 huevos a temperatura ambiente.

-100 gr de azúcar.
-100 gr. de harina.
-30 gr. de maizena.
-20 gr. de almendra molida.
-150 gr. de leche evaporada.
-1 sobre de flan (en mi caso flanín).
-1 sobre de levadura Royal.
-125 gr. de aceite de girasol.

Batimos bien los huevos con el azúcar.
Añadimos el resto de ingredientes, mezclando hasta que no queden grumos. Queda una masa bastante líquida.

Vertemos en moldes o capsulitas de papel (o en un molde grande si queremos hacer un bizcocho). Yo las hice en unas cápsulas de papel dentro de unos moldecitos de silicona, para que no se abriesen.

Rellenamos hasta 2/3 del molde. Me pasé un poco (sobre todo en la de la foto, para que se viese bien) y algunas quisieron “irse de juerga”, pero no lo consiguieron.

Como veis, a algunas les puse una frambuesa, aprovechando que estamos en época. Antes de meterla en el horno flota sobre la masa, pero luego se va al fondo.
Al resto les puse unas almendras picadas crudas, pero como el tiempo de cocción es tan corto, es mejor ponerlas tostadas.

En mi caso, como las cápsulas son tan pequeñas (son de las de trufas, salen las magdalenas de un bocadito o dos), sólo horneé unos 10 minutos a 180º.

Cuando veamos que están doraditas, pinchamos con un palillo y si sale limpio, es señal de que están listas.

Dejamos enfriar (si podemos resistirnos) y decoramos como más nos gusten (yo les puse a unas azúcar glass, a otras unos hilillos de chocolate con leche y el resto tal cual salieron del horno.

Después de probarlas, me quedo con las de frambuesa y chocolate. Mirad el corte...¡Riquísimas!

Como siempre, ¡os animo a probarlas!

ROSQUILLAS

Esta es otra de las recetas tradicionales que hacen en mi familia desde hace generaciones.
Mi abuela las hacía para el día de San José, sólo una vez al año.
Ahora las hacemos un montón, aunque normalmente para fiestas señaladas.

No es que sean difíciles de hacer, pero tampoco podemos decir que es uno de esos postres que se hacen súper rápido. Son un poco laboriosas, pero esto si, una vez que acabas y las pruebas, se te olvida todo el trabajo.

Ingredientes:
Para la masa:-6 huevos.
-harina (725-750 gr).
-12 cucharadas soperas de aceite de girasol.
-10 cucharadas soperas de azúcar.
-1 sobre de levadura química Royal.
-1 pizca de sal fina.
-1 chorrito de anís.
-ralladura de limón (abundante).

Para el baño de azúcar:-1kg de azúcar.
-1/2 vaso de agua.
-1/2 vaso de anís.

Para freír:
-aceite de girasol abundante.
-1/2 cáscara de huevo.
-1 trozo de corteza de limón (parte amarilla).

Mezclamos todos los ingredientes de la masa, y dejamos reposar sobre media hora.
La foto es después del reposado. Como veis, la masa es bastante amarilla, al freírlas quedan un poco más pálidas por dentro.





Nos enharinamos un poco las manos (lo mínimo posible para que no se peguen, pues cuanta más harina, menos esponjosas quedarán), y vamos cogiendo trocitos de masa para cada rosquilla.






Hacemos un rulito, y unimos en los extremos para formar la rosquilla.
Debemos hacerlas bastante finas, pues al freírlas crecen un poco.
Pueden hacerse todas las rosquillas antes, y luego freírlas, pero mejor hacerlas sobre la marcha, salen más redonditas, al moverlas se alargan un poco.





Lo que sí se podría hacer es hacer los rulitos, y luego sólo ir pegando y a la sartén.








Se pone en el aceite la media cáscara de huevo para que no espumee, y la de limón para que no sepa mucho a aceite. Si se prolonga mucho este paso, es mejor sustituirlas por otras, para que el aceite no coja sabor a quemado.





Se van friendo en aceite caliente de girasol, hasta que estén doradas por ambos lados, y poniendo sobre papel absorbente, para eliminar todo el aceite que se pueda. Os recomiendo usar dos tenedores para darles la vuelta, es lo más rápido y cómodo. Quedan bastante sequitas, la verdad, nada aceitosas.







Al acabar de freír, ponemos al fuego el almíbar (azúcar, anís y agua). No hay que esperar a que las rosquillas enfríen para continuar con el siguiente paso. Removemos de vez en cuando para controlar la temperatura.
Una vez que hierva, hay que tener mucho cuidado, tanto de no quemarnos como de que no se salga por fuera.




Cuando veamos que está en el punto de la foto, vamos echando las rosquillas y remojando bien.
Las sacamos a la encimera o a una bandeja de horno, nunca sobre papel, porque se pegarían mucho.
Tal vez sobre papel sulfurizado no se pegasen, nunca lo he probado.
Las cambiamos de sitio antes de que el baño seque del todo, por si se pegan entre ellas.


Tanto el paso de freírlas como el del baño de azúcar es mejor hacerlo entre dos personas, se hace mucho más llevadero. Sobre todo el baño de azúcar, que si no es rápido corremos el riesgo de que no llegue y tengamos que hacer más.

Si nos gustan con mucho azúcar, volvemos a pasar las rosquillas (en mi casa sólo pasamos unas cuantas dos veces, para los muy golosos).



Si nos sobra de este almíbar podemos guardarlo para la siguiente vez, se solidifica y se conserva meses.



Y listo! rosquillas hechas! A disfrutarlas!
Son el acompañamiento perfecto para un chupito de licor café y una buena conversación…o sólo con licor, como prefiramos! ; )

Espero que os animéis a hacerlas y me contéis qué tal os fue.
Y perdonad por tantas fotos, pero es que no sabía por cuales decidirme!